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domingo, 23 de noviembre de 2014

PREGUNTAS CANTO 23 AL 33 CIELO

¿Que examen le realizó el Apostón Santiago a Dante?
¿Que contenía la Cándida Rosa?

ANÁLISIS CANTO 23 AL 33 FINAL DEL CIELO.

Dante llega al cielo de las estrellas fijas  residencia de los Ángeles y allí Dante ve miles de este majestuoso ejército de Cristo. Ante la visión sufre cambios que le permiten tolerar el brillo de Beatriz. Dante explica que su canto no puede describir todo lo que ve ya que es muy majestuoso y esplendido. Dante narra la aparición de María envuelta en círculos de luz y fuegos, y rodeada de dulces melodías llamada por la Iglesia la Rosa mística. Además el arcángel Gabriel se encuentra girando en torno de la Virgen María. Luego la virgen asciende al próximo cielo donde la espera su santo hijo, y todas las luces es decir, los ángeles cantan el himno de María.
Beatriz ruega a los bienaventurados que comuniquen a Dante una miga de su mesa de sabiduría, y estos responden con más danzas. Entre ella sale San Pedro y se acerca a solicitud de Beatriz, Esta le pide  que examine a Dante sobre la virtud de la fe. San Pedro tras su explicito examen a Dante sobre la naturaleza de la fe da como interpretación que si tiene fe, además dice la fuente, objeto y motivos de su creencia. San Pedro al coronar a Dante de su luz, expresa su aprobación.    
Luego aparece el alma de Santiago Apóstol al que Beatriz, luego de saludarla, pide que examine a Dante sobre la virtud de la esperanza. Santiago le hace una serie de preguntas a Dante acerca de la virtud de la esperanza. En  donde Beatriz hace una intervención y contesta a la primera pregunta dejando las demás a Dante. A las respuestas las almas entonan "En ti esperen". Después desciende el alma de San Juan Apóstol y al tratar de mirarlo pero queda enceguecido.
Sin tener el sentido de la vista pero con promesa de recuperarla, a Dante lo interroga San Juan sobre la virtud de la caridad y los motivos que lo mueve al amor de Dios y al amor del prójimo. Al responder las preguntas gracias a la intervención de Beatriz Dante recupera la vista. Rápidamente Dante se encuentra con Adán el primer padre, el cual contesta a las preguntas inquietantes que le hace Dante: el tiempo transcurrido desde que ingresó al Edén, la lengua que hablaba, el nombre primitivo de Dios, el breve tiempo que estuvo en el Paraíso.     
Tras un canto de gloria dado por Dante, San Pedro manifiesta un gigante descontento  contra el Papa Bonifacio VIII y sus sucesores, nombra algunas de sus infamias que cometió en vida, y manda a Dante a que lo revele por todo al mundo. Beatriz invita a Dante a mirar desde este cielo a la tierra. Y juntos ascienden al noveno cielo, motor de los demás y su posición y movimiento explica Beatriz. Ante tan espectacular belleza, Beatriz lamenta muy profundamente los humanos vicios y el desorden por falta de un gobierno veraz y eficiente.
Dante percibe una luz y punto luminosísimo que la vista no puede soportar. Y Beatriz explica la correspondencia entre los coros angélicos y los nueve cielos. Cuánto más elevado es el cielo, más divino es y perfecto. Los círculos angélicos estallan en brillos y cantan Hosanna. El poeta aprende el orden y nombre de las jerarquías angélicas
Beatriz comienza explicando los distintos niveles de la obra de la creación, explica sobre la caída de los ángeles rebeldes y sobre el reino de los ángeles felices a los que llama "amores". También expone por qué los ángeles no necesitan de memoria. Lamenta la vanidad y falsedad de los filósofos y predicadores que fantasean sobre la realidad, y termina exponiendo el ilimitado número de los ángeles.

Seguidamente se alejan los coros angélicos. Dante exalta la belleza de Beatriz y renuncia, a describir tanta hermosura. Están en el cielo Empíreo, pero la luz excesiva que había allí ciega a Dante. Al recuperar la vista, y contempla ahora a todo el Paraíso como un río de luz entre riberas floridas, en el que se reflejan los beatos. Aquella luz forma una inmensa figura circular que es una rosa de luz y fuego. Esta es la  ciudad y morada de las almas beatas en innumerables gradas de resplandor.
El poeta observa en la Cándida Rosa a los beatos y a los coros angélicos, y aparece a su lado a San Bernardo, su nuevo conductor. Dante emite un himno de agradecimiento. San Bernardo muestra a Dante la gloria celeste y el esplendor de María.
 San Bernardo explica a Dante la distribución de los beatos en la Rosa Cándida: de un lado los santos del Nuevo Testamento, de la otra los que creyeron y esperaron en el Cristo venidero. En la grada del medio, más abajo, están los niños que fueron gratos a Dios antes y después de la Redención. San Bernardo invita a Dante a contemplar a la Virgen María y la veneración que le prodiga el ángel Gabriel, y lo exhorta a la oración.
San Bernardo eleva a la Virgen un himno de alabanza y ruega para que Dante pueda ver la esencia divina. Por intercesión de María, Dante puede ir penetrando gradualmente en la luz de Dios, percibe la forma del universo y la ley de amor que une todas sus partes. Contempla simbólicamente la divina Trinidad y el misterio de la Encarnación del Verbo, pero un súbito esplendor pone término a su visión espiritual.   

 

PREGUNTAS CANTO 12 AL 22 CIELO.

¿ En que cielo Dante mira la vision de la aguila?
¿Como se llama ele tatarabuelo de Dante?

ANÁLISIS CANTO 12 AL 22 CIELO

Continuando Dante en su recorrido por el cielo del sol  aparece una segunda corona de almas, entre las cuales se encuentra a San Buenaventura que hace el elogio de Santo Domingo en su sabiduría. Dante observo dos guirnaldas compuestos por 15 almas de sabios que forman otro giro de danza, y cantan un himno triunfal dado a las tres personas en una naturaleza divina
De entre ellas sale el alma de Santo Tomás, y esta disipa la duda de Dante acerca de la sabiduría de Salomón, en relación con la de Adán y con la humana sabiduría de Cristo. Además habla de la importancia de realizar distinciones  y no dar una opinión precipitadamente
Y Beatriz pide que le explique a Dante acerca del esplendor de los elevados y cómo será después de la resurrección de los cuerpos. Entonces Dante escucha de una luz muy resplandeciente una voz muy modesta, como lo es la verdadera sabiduría sin duda era la voz de Salomón. Este responde que, recuperado el cuerpo, nuestra persona será más grata a Dios, porque estará completa y debido a ello aumentará la luz de gloria, la santa visión  crecerá el amor. Después de ello Beatriz aprecio ante Dante tan bella y sonriente por el ambiente
Dante asciende al quinto cielo del planeta Marte. Las almas que han combatido por la fe, se forma una cruz de luces muy vivas y allí resplandecía Cristo las almas cantaban canticos de alabanza muy agradables al oído humano. Entre ello, desciende al pie una brillante estrella a hablar con Dante. Es su tatarabuelo Cacciaguida, quien no se descubre a su descendiente. Dante le solicita que se manifieste con su nombre, y aquella alma le habla de la Florencia pacífica, justa, abstinente de su época, siguió al Emperador Conrado y de este fue hecho caballero, para luego emprender la Cruzada y morir en Tierra Santa para llegar a la paz del cielo
El poeta se agasaja de la nobleza de su familia e interroga a Cacciaguida de sus recuerdos personales y de la ciudadanía antigua de Florencia. Su tatarabuelo le habla de sus antecesores, del orden y belleza de la Florencia antigua, las desgracias provocadas por la llegada de nuevas gentes y la confusión que genera la mezcolanza de estas, la desaparición de las familias antiguas, en decadencia o pervertidas. Dante que en su viaje por el Infierno y el Purgatorio oyó graves palabras acerca de su futuro, pide a Cacciaguida que se las aclare sin rodeos. De esta manera se entera de su futuro exilio de Florencia y esto lo entristece, la pobreza y los sufrimientos que padecerá, pero también del honor y favor de Can el Grande, señor de Verona.
Dante se pregunta si debe callar o publicar lo que vivió en el viaje por el infierno y el purgatorio, pero Cacciaguida lo exhorta a revelar, sin engaño, lo que ha visto y que nada de ello le avergüence. Dante es consolado por Beatriz con voz amorosa de la cual, irradia la paz divina en su hermoso rostro. Cacciaguida nombra a Dante las almas que combatieron por la verdad, y ellas se presentan exaltando su luz y dando vueltas de alegría.
Dante y Beatriz ascienden al sexto cielo que es el de Júpiter, donde están los príncipes sabios y justos. Al llegar los espíritus de luz describían letras conformando la frase: "Amad la justicia los que juzgáis la Tierra”. Luego otras luces descienden y luego forman un águila de luz imperial muy brillante. El águila empieza a hablar como si fuese una sola persona, exponiendo los límites del conocimiento humano incapaz de comprender la justicia divina, de penetrarla profundamente Dante pregunta cómo pueden, en justicia, ser condenados los que no conocieron la revelación cristiana, ni tuvieron fe. El águila le contesta que la razón no es suficiente para comprender la justicia divina y sus misterios. También le dice que al reino de los cielos no ha subido jamás quien no crea en Cristo, ni antes ni después de su crucifixión, y que muchos que claman a él, estarán menos próximos a él en el día del juicio que algunos que no lo conocen condenados por los que no lo conocen. Se recrea sobre los reyes cristianos que, en su conducta, mostraron no conocer a Cristo y se dejaron llevar por la avaricia y la lujuria. El águila que relumbra como sol, calla. Y Más adelante, vuelve a recomenzar explicando y nombrando las almas, que brillan en sus ojos y en sus cejas. Dante se maravilla de encontrar entre ellas a dos, provenientes del paganismo, Trajano emperador y Ripeo. El águila responde que el primero fue salvado por las oraciones del Papa Gregorio, y el segundo que sus virtudes teologales le valieron como bautismo. Y termina diciendo que la razón humana no puede comprender la razón de la predestinación.    

Después Dante y Beatriz ascienden al séptimo cielo, el cual es el de Saturno, donde están las almas contemplativas. Aparece una escalera de oro por la cual descienden los bienaventurados. Uno de ellos, san Pedro Damián, cuenta su vida y la dulzura de la vida contemplativa, y reprocha el lujo y la vida depravada de los prelados de entonces. Luego Dante ve descender girando unas almas, las cuales lanzan un grito que lo asusta. Beatriz explica que el grito que oyó es la exclamación de las almas para que se haga justicia. Encuentro con san Benito que le cuenta su vida, los buenos monjes que en Monte Casino hubo, le dice que podrá verlo en el cielo Empíreo, sin el velo de la llama que lo rodea, y deplora la avara vida que llevan sus monjes. Dante sube al octavo cielo de las estrellas fijas y se encuentra dentro de las que conforman la constelación de los Gemelos, signo bajo el que nació, y les ruega fuerzas para el próximo trance. Antes de seguir, Beatriz le pide que mire el mundo de planetas por el que vino subiendo. Dante los recorre y entre ellos observa la Tierra. Y se vuelve a Beatriz.            

PREGUNTAS CANTO 1 AL 11 CIELO

¿Cual es el primer cielo y quienes se encuentran alli? 
 ¿Que enseñanza nos deja el segundo cielo?

 

                                                                                                       

ANÁLISIS CANTO 1 AL 11 COMIENZO DEL CIELO.

Advertencia a los lectores y aliento a los pocos que han abierto su inteligencia. Dante asciende al cielo de la Luna y se maravilla de cómo los cuerpos puedan compenetrarse. Sobre las manchas de la Luna, Beatriz le explica la causa y el fenómeno de la luz de los cuerpos celeste. En el cielo de la Luna residen las almas de los que no guardaron fe a sus votos. Piccarda Donati explica a Dante el sentido de la beatitud, la jerarquía de los cielos y de los beatos, y la conformidad al querer divino. Narra su historia. Presentación de Constanza. Dante expresa dos dudas que le preocupan: sobre el porvenir y retornar a las estrellas de las almas, y los votos quebrados por violencia de terceros. Beatriz explica a Dante que todas las almas residen en el cielo empíreo, pero se muestran en diversos cielos para que Dante pueda comprender los diversos grados de felicidad. Explica que las almas no han consentido quebrar sus votos sino para evitar un mal mayor. Dante pregunta sobre la posibilidad de conmutar los votos por otro servicio. Después de explicar a Dante por qué no puede sostener su mirada, responde a la pregunta de si los votos pueden intercambiarse por otro servicio, a lo que Beatriz responde que el voto en sí, que es un pacto entre el hombre y Dios, no puede alterarse, pero si la materia del mismo con permiso de la Iglesia. Ascenso al cielo de Mercurio, donde están los espíritus que amaron la gloria humana. Dante habla con uno de ellos.  El emperador Justiniano cuenta su vida, y extiende su relato a las glorias del imperio romano. Deplora las ofensas de güelfos y gibelinos contra el águila imperial. Presenta a algunos beatos de este cielo y glorifica a Romeo de Villanova. Se alejan los espíritus del cielo de Mercurio cantando alabanzas. Beatriz explica a Dante cómo fue justa la muerte de Cristo y el posterior castigo de los Hebreos, y se extiende en razones de porqué Dios salvó a la humanidad mediante la Encarnación. Explica los misterios de la creación, las criaturas incorruptibles y el dogma de la resurrección. 
AL AMOR FAMILIAR  Beatriz y Dante llegan al tercer cielo, en el planeta Venus, donde encuentran las almas de los que recibieron sus influjos. Entre los espíritus amantes, el poeta encuentra a Carlos Martel, revive un recuerdo juvenil y escucha el drama de la casa de Anjou. Motivo de las posibles diferencias de padres a hijos y valor providencial de las inclinaciones naturales. Carlos Martel vaticina los engaños urdidos contra sus hijos. Avanza otra luz de Venus y narra su historia y la corrupción que reina en la Marca Trevigiana. Se presenta y narra su historia, a pedido de Dante, el trovador y luego obispo Folco de Marsiglia, el cual se refiere a Raab de Jericó, que favoreció la acción palestina de Josué en esa Tierra Santa que el pontífice, por codicia de dinero, ha olvidado.           
LOS GRANDES TEOLOGOS Y LOS FUNDADORES DE ÓRDENES MEDIEVALES  El poeta admira la sabiduría divina en el movimiento de los astros y su benéfico influjo en la tierra, causado por la disposición del zodíaco, oblicuo respecto al ecuador. Entran Dante y Beatriz en el cielo del Sol, donde están, más brillantes que el mismo astro, como una corona, doce espíritus sabios. Santo Tomás de Aquino nombra a los otros once, que en ronda danzan y cantan una melopea celestial.
En la gloria celeste, Dante considera el obsesión de las pasiones humanas. Santo Tomás aclara una de las dudas del poeta, y sobre el diseño de la providencia en dar nacimiento a las órdenes religiosas franciscanas y dominicas. Elogio de San Francisco: su nacimiento, amor de la pobreza, sus seguidores, aprobación de la orden, viaje a Oriente, sus estigmas y su muerte. Advertencia de Santo Tomás a los dominicos disolutos. 

PREGUNTAS CANTO 23 AL 33 PURGATORIO.

¿ que accion realizaba e rio lacteo?

¿como fue en encuentro de dante con beatriz?